La preservación de la lengua amuzga (Tzjón Noá) en los libros del lingüista Fermín Tapia

Don Fermín Tapia García  ha vivido sus 80 años, en la comunidad de San Pedro Amuzgos. Quien se detiene a hablar con él, puede escuchar  a detalle la historia y cambios que han ocurrido en el pueblo, historias que forman parte de los libros que ha escrito en la lengua Tzjón Noá para plasmar y compartir la cultura e identidad de su gente.

 

Don Fermín Tapia García y su familia. Foto: CODIGO DH

Haciendo una pausa entre cada palabra, don Fermín trata de revivir sus pensamientos, y recuerda que durante su infancia, en varias ocasiones tuvo que esconderse entre el monte cuando se dirigía a la escuela primaria, él no sabía hablar español y era discriminado, como la mayoría en San Pedro Amuzgos, por comunicarse en su lengua materna.

La gente mestiza que vivía en Amuzgos y que hablaba español, era considerada como gente de razón, mientras que  aquellos que hablaban en Tzjón Noá eran tratados despectivamente como indios.

“Muy pocos indígenas asistían a la escuela, los ‘ricos’ nos quitaban la poca comida que traíamos para tres días, nosotros los indígenas hasta teníamos miedo, porque no entendíamos lo que decía la gente de razón, solo sabíamos decir no o sí, y cuando oíamos chiflidos, sabíamos que ahí venían y mejor nos escondíamos”

Comparte Don Fermín, quien también comenta que durante las clases no dejaban que nadie se expresara en otra lengua que no fuera el castellano, así que permanecían en silencio, así fuera la mayoría en el salón de clases.

Con los años aprendió a hablar también el castellano, a escribir y a leer y motivado por su curiosidad, siendo sacristán por elección de la gente del pueblo, tradujo por primera vez un cuadernillo del misal al idioma amuzgo.

“Lo intentamos sin saber las reglas de los signos más importantes que se necesitan para confirmar el sonido de la lengua, lo escribimos pero después tratamos de leerlo y no salía la palabra como se habla, no servia, y un día fui con un sacerdote a Atoyac y se me ocurrió la idea de preguntar, cómo se dice esto y esto y así empece a escribir”

A sus 80 años Don Fermín, el lingüista de Amuzgos, ha escrito diversos libros en su lengua materna, entre los que destacan: Diccionario Español-Amuzgo, Libros de etnobotánica de los Amuzgos parte 1, Etnobotánica de los Amuzgos ‘los bejucos, zacates, hierbas y otras plantas, La numeración en Amuzgo, Cuentos y leyendas de San Pedro Amuzgos, entre otros.

“En 1975 fui  regidor del pueblo, llegó una maestra investigadora con una lista de palabras en español que me pidió que tradujera, jaguar, tortilla entre otras, una lista grande y ahí empecé en serio, le pedí tiempecito para copiar y me dijo que si, pasó medio año para que me invitará a trabajar con ella en la ciudad de México y acepté”

Ganando 10 pesos la hora, el lingüista de Amuzgos, aprendió a traducir textos y a escribir sus libros, aunque confiesa que los primeros días no le alcanzaba para sobrevivir allá, su esposa tuvo que vender una prenda de su huipil que usaba en ese momento, para conseguir un poco de dinero.

Fue en el año de 1987 cuando por fin vio publicado el primer diccionario Español-Amuzgos, lo que representó el fortalecimiento y la preservación de su lengua materna, puesto que ahora la gente de su pueblo podrá conservar en las próximas generaciones, su lengua, su identidad y sus raíces.

Actualmente Don Fermín comparte sus libros con orgullo, aunque lo primordial era redescubrir y demostrar su lengua, para que las nuevas generaciones de estudiantes los vean y consulten, siente nostalgia pues percibe la falta de interés por parte de los jóvenes para seguir documentando su cultura. A pesar de que en Amuzgos aún prevalece la lengua Tzjón Noá como forma de comunicación entre sus habitantes.

También cabe destacar el esfuerzo e importante labor de más personas de la comunidad, como la profesora Bilingüe Jubilada, Carmen Florinda Martínez Bernabé,  quien  tradujo el Himno Nacional Mexicano al idioma amuzgo.

La profesora Carmen también ha hecho importantes aportes a su lengua, con palabras como: Kába (subir, ascender), Kábe (guardarse alzarse), Kata (catalina), Kí (duro), Kesó (queso),Kíntzi (chino) y de igual forma, comparte la importancia de valorar el idioma para trasmitirlo a las nuevas generaciones amuzgas.