Hoy es el Día Mundial de la Prevención del Suicidio, día creado por la OMS para visibilizar esta problemática de salud mental que afecta a miles de personas en el mundo. En Oaxaca, según cifras de los Servicios de Salud (SSO), del 2018 al 2022 se registraron 875 suicidios, principalmente en hombres jóvenes 20-29 años, de ahí que es vital la detección temprana de factores de riesgo y seguimiento de casos con personal profesional.
El suicidio es una controvertida y paradójica elección ante la desesperación de no poder transformar la vida y ajustarla a sus deseos, necesidades, sueños, o acabar con el sufrimiento. En la mayoría de los casos hay señales de alerta pero muchas de las veces se interpretan desde el desconocimiento, el prejuicio y la falta de empatía. Desde una perspectiva humanizada se requiere básicamente la profunda comprensión de las situaciones que llevan a una persona -indistintamente de su edad, condición académica, social, económica- a tomar esta última decisión.
Hablar del suicidio es fundamental para la prevención. Cuando se detecta e interviene los suicidios disminuyen, ya que la persona no busca morir sino dejar de experimentar dolor; asimismo no hay evidencia de ser hereditario, dependerá de los factores particulares en cada situación. El estigma alrededor del suicidio es muy grande por eso vale la pena hablar de él, que la persona pueda hablar sin que se le enjuicie, esto puede motivarle a buscar apoyo.
En caso de requerir apoyo, la población puede llamar a la línea de la vida 800 911 2000, en la que personal altamente calificado brinda orientación y acompañamiento las 24 horas de los 365 días del año, de manera gratuita.