Como un maestro tímido y dulce, describen muchas y muchos a Julia De la Rosa, quien dedicó años de su vida a niñas y niños de preescolar, a través de la docencia, en el Istmo de Tehuantepec; al mismo tiempo su familia la recuerda como una diva, una mujer que “entregó su amor promoviendo el respeto a la diversidad de género”.
Julia De la Rosa murió este martes 21 de mayo de 2024, en Unión Hidalgo, Oaxaca, pero el legado y enseñanza, así como su vibrante personalidad, no morirá.
En un escenario de la lucha por los derechos de la comunidad LGBTQ+, destaca su historia que podrá inspirar a más de uno o una, no solo ha sido una figura visible y orgullosa de la comunidad Muxhe del Istmo, sino que también ha incursionado en el mundo del cine, participando en un cortometraje galardonado que ha capturado la atención internacional, ‘XQUIPI’.
“Fue hasta que aparecieron los ojos de Julio que pude escribir la película. El guion estaba listo y Julio era el protagonista. De inmediato fui a mi libretita donde tenía su número telefónico y a la siguiente semana, Julio estaba ensayando conmigo y con Azucena. Ensayamos un mes y medio dos veces por semana, hasta que filmamos.
En esos momentos lo conocí: su dulzura casi infantil, su bondad indiscriminada y su lucha por ser libremente lo que llegó a ser, una artista. Entonces llego la filmación y con su nuevo vestuario y su maquillaje, Julio me confesó que quería que en los créditos la nombráramos Julia De la Rosa y desde entonces fue Julia para mí. Durante el rodaje, en una escena que había escrito antes de escribir todo el guion, Julia bailaba un mambo en el corredor de una casa de Tehuantepec y el día que la filmamos hubo magia. Nunca me pasó algo similar en una filmación hasta ese momento en el que todos callamos y sólo sonó el mambo por dos minutos y medio.Julia nos regaló algo que no puedo escribir, pero era lo más cercano a un acto mágico”.
Así lo recuerda Juan Pablo Villalobos, director del corto, mismo que se proyectará en la ´Semaine de la Critique en Cannes 2024’, y que habría cautivado al público en el Festival de Locarno, con la actuación de Julia De la Rosa como protagonista.
Más allá de su participación en el cine, Julia De la Rosa, fue una voz activa para la sensibilización y educación sobre diversidad sexual y de género y su legado forma parte de una lucha por un mundo más inclusivo y respetuoso.
Descanse en Paz Julia de la Rosa.