Como parte del trabajo del Comité de Defensa Integral de Derechos Humanos Gobixha. A.C. CODIGO DH, para promover acciones que permitan la defensa de los derechos humanos, así como el fortalecimiento a grupos dentro de los procesos organizativos y con el objetivo de conocer sobre el tema del cuidado colectivo desde un enfoque psicosocial y su complejidad con el autocuidado, la interacción del contexto laboral, familiar, político y educativo; concientizar y disminuir la normalización de las conductas violentas; el día 22 Y 23 de marzo del 2024, se llevó a cabo el taller: “Del autocuidado al cuidado colectivo de las mujeres defensoras MDDH” con una población de mujeres defensoras de diferentes regiones del estado de Oaxaca.
El autocuidado forma parte de la vida cotidiana. Son los actos diarios que realizamos para cuidar de nuestra propia salud, bienestar y necesidades sociales y psicológicas.
El cuidado colectivo es una interacción recíproca entre las personas que conforman un colectivo, comunidad, etc. buscando el bienestar de quienes le integran, en los diferentes ámbitos, para ello son necesarias prácticas saludables que fomenten la salud en su más amplio sentido, el crecimiento, el fortalecimiento de la espiritualidad, entre muchos otros factores.
A la par de identificar prácticas de cuidado, es relevante también notar las situaciones de abuso-violencia que se cometen en los diferentes contextos de los que se forma parte y que en ocasiones no son claramente reconocidos por encontrarse normalizados en la vida cotidiana.
En el taller se compartieron experiencias y reflexiones sobre la importancia del cuidado colectivo y autocuidado en la promoción de liderazgos femeninos en la defensa y promoción de los derechos humanos. Reconocer qué se ha hecho en la práctica, cómo se ha nombrado y qué se puede fortalecer en la dinámica personal, colectiva, comunitaria para construir una propuesta integral que favorezca formas de vida más dignas y saludables.
Tales prácticas toman relevancia cuando nos referimos al ejercicio de la defensa de diversos derechos por parte de las mujeres, ya que la estigmatización de este ejercicio se suma a otras formas de discriminación y maltrato que ya se experimenta en diferentes ámbitos de su existencia. Contar con espacios para reflexionar al respecto así como para la recreación, aun cuando constituyen derechos inherentes, no necesariamente se ejercen plenamente; por lo tanto, es prioritario continuar propiciando espacios que faciliten incrementar la conciencia en torno a aquello que requiere cuidados, integrando a todos los seres vivos como parte de un todo más extenso y complejo.