- A más de dos meses de la agresión sufrida (15 febrero), continúa en recuperación.
- Justicia pendiente en su caso, medidas cautelares sin aplicarse debidamente.
Marcelino Coache Verano, sindicalista y ex-vocero de la APPO, se encuentra en recuperación luego de la severa lesión que sufriera en la cabeza, el pasado 15 de febrero el marco de la visita del Presidente Felipe Calderón a Oaxaca, al explotarle un petardo de gas lacrimógeno lanzado por la Policía Federal.
La fractura craneoencefálica que sufriera el Sr. Coache Verano y la lenta recuperación que ha tenido, pospuso la denuncia de los hechos hasta mediados de marzo, misma que se presentó ante la Procuraduría General de la República (PGR) toda vez que los elementos que participaron en el operativo de donde resultan estos hechos son miembros de las fuerzas federales. La denuncia se presentó por los delitos: contra funcionarios públicos, tentativa de homicidio, abuso de autoridad y lesiones graves. A la fecha suman 9 denuncias por las diversas agresiones sufridas y ninguna de ellas presenta avances significativos.
Marcelino Coache es un destacado sindicalista. Señala que hay pendiente una Auditoría sobre el mal uso de los recursos de los trabajadores, especialmente del Fondo de Pensiones. Así como la atención de las necesidades básicas de las diferentes áreas de trabajo que han estado abandonadas por la falta de recursos. Por ello ha contado con la solidaridad de las bases del Sindicato Libre del H. Ayuntamiento de Oaxaca de Juárez, asi como de organizaciones sociales e internacionales.
En el marco del acompañamiento internacional de Brigadas Internacionales de Paz (PBI) a Código DH y el seguimiento de los casos que lleva la organización, PBI visitó recientemente a Luis Ugartechea, presidente municipal de Oaxaca de Juárez, con quien habló sobre la situacion de riesgo y las amenazas que ha recibido. Cabe mencionar que Marcelino Coache cuenta con medidas cautelares dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desde 2009.
Por todo lo anterior, seguimos exigiendo al Estado Mexicano el cumplimiento de las medidas de protección para la Familia Coache Rivera y la realización de las investigaciones correspondientes al caso, toda vez que su vida e integridad física siguen estando en peligro.